03 julio 2007

Midnight in Barcelona

Ayer paseaba por Barcelona cuando me encontré a una amiga, es una directora de cine que además de haber estudiado, trabajado y preparado una carrera, llevabá tiempo detrás de una ayuda para poder rodar en Barcelona. Lo último que supe de ella, hasta ayer que la vi, es que estaba liada detrás de encontrar permisos para poder rodar en exteriores y en conversaciones con el ICUB (Institut de Cultura de Barcelona) para ver de recibir una subvención. Al verla venir a lo lejos por la emblemática calle Petritxol no pude hacer más que alegrarme, me acorde de sus sueños y la recibí con un afectuoso abrazo pensando que todo le iria de maravilla, aunque mi alegría fue más bien efímera ya que mi amiga mostraba una cara más bien desencajada, al preguntarle por su estado de animo, su respuesta fue contundente… "Me marcho de Barna".

Mi amiga se había enterado que el ayunta-miento de Barcelona a través del ICUB ha ofrecido una subvención de dos millones de euros a Woody Allen para la película que el próximo lunes comienza a rodar en la ciudad, además dicha institución ni siquiera sabe cuanto costara el presupuesto del rodaje. Dos millones de euros es una cifra que muchos podrán justificar diciendo que para un súper-director como Allen no es una gran cifra, cierto, pero resulta que en la ciudad existe un potencial artístico y cultural que además de vérselas de mil colores para llevar a cabo un proyecto, muchísimas complicaciones para conseguir permisos para poder rodar, y mil palos en las ruedas colocados por los encargados de administrar y fomentar la cultura en la ciudad, ahora toca tragarse el montaje propagandistico consistorial financiado con dinero público. Que si hubiera que distribuirlo de una manera más justa, quizás primero se debería promocionar los talentos nacidos de la ciudad, y después si sobra pasta, financiar a la gente de fuera.

Pero cierto es lo que el actual panorama nos presenta en la ciudad, en la que se están marchando los creativos, los artistas, las personas que le daban vida, enriqueciendo nuestra cultura, con un ayunta-miento repleto de incompetentes que lo único que saben es despilfarrar el dinero público en traer gente de fuera a los que les pagan cifras desorbitadas, hacer viajecitos "a todo trapo" por el mundo en busca de talentos y poner un muro infranqueable a toda muestra creativa o de libre expresión que nace en la ciudad.

Al llegar a casa empecé a buscar información puesto que otra cosa en la que es especialista nuestro ayunta-miento es en hacer publicidad de lo buenos que son, y buscando partidas en los presupuestos municipales encontré que el Ajuntament de Barcelona se gasta anualmente 33 millones de euros en publicidad, además contribuye con otros 12 millones en la manipulada BTV que últimamente cierra programas críticos y de cultura libre para abrir espacios dirigidos por reputados lameculos y pregoneros al servicio del alcaide, digo alcalde. Para que os hagáis una idea de lo que representa el presupuesto de publicidad del ayunta-miento os informare que una corporación trasnacional acusada de realizar practicas pseudo mafiosa como la Coca Cola gasta en toda España 47 millones de euros anuales en publicidad, si tenemos en cuenta que la Coca Cola es de las marcas que más invierten en publicidad y observamos su presupuesto para toda España, quizás podríamos alarmarnos de lo que se gasta el Ajuntament solo en una ciudad y lo peor de todo es que se hace con dinero público. Por si no fuera poco, y para acabar de horrorizarme con las cifras, también pude observar como el Liceu se lleva el 60% del presupuesto de cultura de la ciudad.

Así pues la ciutat/botiga que dicen que “batega”, parece que solo va a latir para los turistas y empresarios que se forraran con las legiones de "guiris" que estarán encantados con una ciudad creada para sus vacaciones, el tripartit municipal está convencido que lo que la ciudad necesita para el futuro es crear un “Marina D’Or” gigantesco, la Disneiland del mediterráneo, y para ello no se escatiman recursos, se coge la pasta de lo que exprimen a la ciudadanía, y comienzan a regalarla como si el dinero fuera de ellos, sin tener en cuenta que el presupuesto municipal tendría que servir para financiar a la gente de la ciudad y no a la gente que viene de fuera, y ahora por favor que nadie caiga en el error de argumentar que esto es un pensamiento provinciano, por qué así lo hacen en las grandes ciudades del mundo, y no son tan provincianas, claro que hay que dejar una partida presupuestaria para importar cultura de todas las partes del mundo, pero nunca debemos de olvidarnos que principalmente pagamos para fomentar nuestra cultura, la que se crea en las calles, talleres, estudios y espacios libres, la que forma y personaliza nuestra identidad… por qué si no prestamos atención a algo tan importante como es la propia creación cultural, además de tener que importarla de fuera, nos quedaremos sin la nuestra, y una ciudad sin una cultura propia es una ciudad muerta.

Después del fiasco del Fòrum, parece que siguen sin aprender la lección, siguen cerrando espacios de cultura libre, siguen persiguiendo a los músicos de calle, no ofrecen ayudas para proyectos, si quieres hacer un rodaje en la calle es más fácil irse a Madrid o a otra ciudad, además como falta pasta por un tubo para que puedan ir por el mundo como si fueran los reyes del mambo, nos imponen multas, sanciones, zonas verdes, azules y ordenanzas “cívicas” para conseguir recaudar más y más pasta para seguir despilfarrando, claro que la gente comienza a rebelarse y un dato de esta disidencia es observar como el 73% de las multas impuestas por el ayunta-miento no se han cobrado, así pues tienen pendiente de cobrarnos 8.684.000 € que la ciudadanía debemos al consistorio y que por la parte que me toca ya pueden sentarse a esperar que les pague.

Ya estamos cansados de tanta incompetencia, de cómo el Ajuntament de Barcelona realiza a diario malversación de fondos públicos gastándose nuestro dinero en subvencionar proyectos a dedo y sin mecanismos democráticos que lo puedan controlar, mientras, ni siquiera deja migajas para la gente de la ciudad, los creativos se están marchando, los artistas se están marchando, los jóvenes se están marchando, el panorama es más preocupante de lo que parece, Barcelona corre el peligro de perder su magia (si es que no la ha perdido ya) su chispa, aquello que la diferenciaba del resto, sus tendencias creativas, su arte en la calle, la cultura popular elevada a un grado superior, una cultura que nos ha definido y formado con una identidad propia y una personalidad muy característica… Ahora nos están engañando, se están puliendo nuestra pasta en autenticas tonterías, nos están quitando la identidad y lo peor de todo, es que no estamos haciendo nada para evitarlo.

2 comentarios:

Arturo Manuel dijo...

Kerido amigo, el relato de tu amiga me ha parecido frankamente lamentable dado ke entre ella y yo, deben ser pokas las diferencias por el simple hecho de ser creadores. Yo fui de los ke pensé, akí, en esta ciudad ke a penas ya tiene nada, no me kedo. Klaro ke lo ke pienso ayer mañana no me sirve y estoy konvencido de ke de akí no me pienso mover por el momento, simplemente por ke akí es donde kiero estar, por ahora. También soy de los ke opino ke Barcelona ya no es lo ke era pero ke, tarde o temprano, los ke aun sigamos konvencidos en pintar este cielo multikolor, nacerán tantas flores ke será imposible ke ninguno de vosotros os kedéis sin ninguna.

Anónimo dijo...

Bueno, quizás solo fue un arranque de ira... yo tampoco creo que se vaya... aunque a veces dan ganas.

No obstante cabe saber que muchos colectivos de cultura alternativa y artistas se han marchado a Berlin, Londres y Madrid, que gente que quiere rodar sale fuera de la ciudad por qué pedir un permiso para rodar en la calle es el cuento de nunca acabar.

Y como esto muchas cosas, la verdad que tienes razón hemos de resistir y sobre todo reinventar algo que permita espacios para la creación, como decia Orwel podran pisar algunas flores pero nunca podran parar la primavera.